Prohibir los toros no compensa
Prohibir las corridas de toros en España no compensa. De hecho el estado perdería de manera estimada 3,6 billones de euros, según los datos de la Asociación Nacional de Organizadores de Espectáculos Taurinos (ANOET).
Las cifras, citadas por Europa Press, se basan en las 6,1 millones de entradas vendidas el año pasado, así como los 199.000 trabajos y 57.000 puestos directamente relacionados con la tauromaquia.
Solamente Madrid se enfrentaría a una pérdida de 244 millones de euros en los ingresos si prohibiera las corridas de toros: 232 millones se perderían indirectamente mientras que 12,2 millones se perderían directamente.
Muchos de los turistas que vienen a Madrid incluyen en su recorrido una parada en Las Ventas para ver una corrida de toros, y claro, si no hay corridas de toros, tendrían que ir a otro sitio.
En este momento, cuando el empleo es tan necesario, el gobierno se centra en reforzar cualquier aspecto cultural y turístico de cualquier naturaleza, que les permita aumentar el número de empresas y puestos de trabajo en Madrid.
Unos 900.000 visitantes asistieron a diversos eventos ofrecidos en Las Ventas la temporada pasada con más de 80.000 personas participando en un tour por el ruedo. La ciudad también ha reabierto el Museo Taurino después de renovaciones y espera más de 100.000 visitantes allí.
Los pueblos de la comunidad de Madrid celebraron un total de 942 corridas de toros durante todo el año pasado con más de 1 millón de visitantes.
Aunque son muchos los que han intentado que se prohiban las corridas de toros en España por los derechos de los animales, y se ha conseguido en Cataluña, hay mucho más que los animales en este juego de crueldad.
El ayuntamiento de Madrid ha cortado a las subvenciones a las corridas de toros el año pasado para ayudar a las víctimas de la violencia doméstica. Su alcaldesa, Manuela Carmena, ha eliminado la subvención anual a una escuela de toreo porque "va en contra de los derechos de los animales".
En 2012 Cataluña fue la segunda región (después de Las Islas Canarias que llevan con la prohibición desde 1991) en prohibir las corridas de toros. Sin embargo, San Sebastián las he vuelto a instaurar después de proscribirlas durante tres años.
Los grupos pro taurinos han luchado contra las restricciones para conseguir continuar con la tradición protegida por el patrimonio cultural. Está claro que prohibir los toros no compensa en ninguna comunidad, pero a veces el dinero no es lo más importante.